La paradójica tragedia de muchos migrantes: huyen de la crisis gestada por Maduro, para aterrizar bajo el gobierno de las FARC y el ELN La captación de personas, especialmente jóvenes y adolescentes en la frontera aumenta alarmantemente, los mismos estarían siendo estimulados con el ofrecimiento de dinero, y tendrían la particularidad de ser personas que corresponden a los grandes grupos de migrantes que huyen de la crisis multidimensional que sufre nuestro país. Algunos nos han relatado, que les ofrecen viviendas para que puedan vivir junto a su familia, y comida, a cambio de trabajo en algunas fincas en Colombia, al trasladarse con la esperanza de ayudar a su familia y a sus hijos que se quedan en Venezuela, pero los ofrecimientos se diluyen al llegar a las supuestas unidades de producción agrícola, al encontrarse con la realidad de que deben realizar actividades inherentes, al cultivo y atención de sembradíos de coca y marihuana, hasta la recolección de la hoja para su procesamiento final. Esta modalidad por parte de las FARC y el ELN, en nuestra frontera se constituye en una nueva forma de aprovechamiento, ante las enormes debilidades sociales que presentan hoy los núcleos de venezolanos que huyen de la perversidad de la tiranía que castiga al pueblo sin clemencia, provocando su migración constante y a la vez haciéndolos presa fácil de los grupos irregulares que los captan para incorporarlos en su estructura criminal de fortalecimiento a todo el andamiaje correspondiente al narcotráfico, desde el cultivo, hasta la atención, y finalmente el procesamiento y la comercialización de diversas drogas. Desde Fundaredes hacemos énfasis a la población migrante de tomar las consideraciones respectivas con relación a esta forma de operar de la guerrilla y el narcotráfico, son muchos jóvenes que alertan que algunos los han desaparecido toda vez que se manifiestan contrarios a la realización de estas actividades. En consecuencia, huir de la honda crisis venezolana, y disponerse a la búsqueda de una actividad que les garantice el sustento fuera de Venezuela y la posibilidad de apoyo económico a los familiares que quedan en el país, puede suponerse en un verdadero infierno de dimensiones fatales si se termina bajo las ordenes de los grupos irregulares, quienes demandan el cumplimiento de sus labores con fusil en mano.